Nuestra experiencia nos avala.
Durante más de medio siglo, nuestra familia se ha dedicado, como jueces y abogados, precisamente, al Derecho de Familia.
Transmitiéndonos una auténtica pasión por esta disciplina.

Formamos un equipo muy unido, motivado y con una mezcla equilibrada entre juventud y veteranía.
Entre nuestros pilares se encuentra la mejora profesional a partir de formación continuada de calidad, participando, activamente, en la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA), así como la empatía y cercanía, con vosotros, nuestros clientes, dado que, además de la labor jurídica no podemos obviar la gran importancia del componente psicológico, las crisis matrimoniales son situaciones difíciles e incómodas, y en nuestro despacho no solo las hemos vivido desde el plano jurídico, si no también, como progenitores e hijos, en el plano personal.